De turistas por Madrid,nos acompañó un buén cicerone,Fernando J. de la Cuesta y su amable esposa que nos enseñó gran parte del Madrid antigüo.Gracias amigos.Cordialmente J.B y Conxi.
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La estatua de Felipe IV (1605-1665) responde a una iniciativa del propio monarca, quien quiso contar con una escultura ecuestre similar a la ahora existente en la Plaza Mayor de Madrid, erigida en honor de su padre, el rey Felipe III (1578-1621). Realizada en bronce, esta figura fue empezada por Juan de Bolonia (1529-1608) y terminada por Pietro Tacca(1577–1640), en 1616.
Felipe IV manifestó su deseo de que la obra que le retratase superara en calidad artística e impacto visual a la de su padre. Tal empeño lo materializó el Conde Duque de Olivares, dando la orden expresa de que al monarca se le representara montado sobre un caballo encabritado y andando en corveta, un modelo hasta entonces inédito en el terreno de la escultura, dada su enorme dificultad técnica.1
La obra fue encargada a Pietro Tacca, al que le hicieron llegar a Italia dos bocetos pintados por Velázquez (1599-1660), uno con el rey a caballo y otro de medio cuerpo.2 Tacca trabajó seis años en la escultura, desde 1634 hasta 1640. Dos años después fue trasladada a Madrid desde los talleres del artista en Florencia, donde la estatua fue fundida en bronce.
Según la tradición, el escultor italiano contó con el asesoramiento físico-matemático de Galileo Galilei (1564-1642), quien le sugirió que, para lograr que el caballo se sujetase solamente sobre dos patas, hiciera maciza la parte trasera de la escultura y hueca la delantera. Esta solución, pionera en el mundo del arte, impuso un nuevo modelo estatuario, que ha estado vigente durante los siglos XVII y XVIII.3
Otro de los artistas que trabajaron en el proyecto fue el escultor Juan Martínez Montañés (1568-1649), quien aceptó el encargo deVelázquez de modelar una cabeza del rey, para que Tacca tuviera una referencia en relieve de los rasgos faciales de Felipe IV. Su trabajo en el citado busto quedó reflejado en un retrato que Velázquez le realizó entre junio de 1635 y enero de 1636; en este cuadro, Martínez Montañés posa junto a una cabeza del rey apenas esbozada (Museo del Prado).
Cuando Tacca envió a España el primer modelo en barro de la estatua para su aprobación por el monarca, éste no dio su visto bueno a la cabeza, pues no encontraba parecido con su rostro. Ésta finalmente fue realizada por Ferdinando Tacca, hijo del esculor italiano, lo que explica su menor calidad con respecto al resto de la obra.