Trato recibido del Ejercito.

FORO de la WEB "La Mili en el Sahara"
Albert Marin Ausin
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Re: Trato recibido del Ejercito.

Mensaje por Albert Marin Ausin »

Compañeros saharianos, he leído los comentarios en el Libro Diario y, por ello, he creido conveniente "aflorar" este tema que estaba "escondido". Pienso que aquí es el lugar idóneo para debatir.

Sin duda hay diferentes opiniones sobre el trato que recibimos de nuestros mandos y del Ejército. Pienso que todas las que he leido son legitimas. Yo, en el 73 y 74, conocí estupendos mandos y otros que no estaban a la altura. Mandos que sin perder su autoridad y haciendo cumplir la disciplina militar, respetaban a la tropa. Otros, no tantos, se valían que no podiamos rebotarnos para putearnos. A alguno le habría dado una patada en la entrepierna o, por lo menos, mandarlo al carajo (carajo, cesto en lo alto de un mástil para el vigía, lugar que no gustaba a la marinería). Pero éramos el último escalafón y teníamos que aguantar mucha mala leche.

En la mili de aquella época no podíamos hablar ni quejarnos, pero ahora ¿por que´no vamos a comentar lo que pasamos? ahora que no estamos reprimidos por la "disciplina militar".

Otra cosa es que criminalicemos a todos los mandos en general, cosa que no comparto, pues muchos de ellos también sufrían las carencias y precariedad de medios (tradicional) del Ejército español.

Recuerdo a grandes mandos, especialmente al Capitán Juan Manuel García de Carellán, a otros que eran excesivamente ortodoxos o duros, pero buenos profesionales, y también a despotas, incluso a algún bestia que no merecía estar en el ejército, pero no guardo ya rencor de ninguno de estos últimos.

Deberíamos ser ecuánimes, no generalizar, ser más objetivos que subjetivos, pero pienso que en ningún caso, a estas alturas y a nuestra edad, debemos reprimirnos al comentar nuestras vivencias.... Siempre que estas sean ciertas.

No a la censura, sí al debido respeto....¿Donde están los límites?...todo es tan relativo.

Saludos a todos
"El furri errante"
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Domingo Rodriguez D
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Re: Trato recibido del Ejercito.

Mensaje por Domingo Rodriguez D »

Hola Albert:
Dado que han sido mis comentarios los que han producido esta tormenta en un vaso de agua,creo que debo aclarar lo que por mi parte corresponde.
Pensar que dentro de mi existe odio para aquellos que hace tantos años fueron nuestros mandos es sencillamente estúpido,no obstante¿se puede recordar al compañero o compañeros con los cuales convivimos y tener amnesia absoluta para lo que no nos gusto?
¿Se falta al respeto por contar ,sin insultos,los tropiezos que uno tuvo con aquellos que detentaban el mando?.
¿Estamos los españoles condenados a santificar a los muertos?
¿La historia solo es cierta si se ajusta a nuestro gusto?
¿No vamos los españoles a comprender que el que no se comparta nuestras ideas no significa que seamos enemigos?
¿Cada palabra que se vierta en estas páginas ha de ser previamente censurada por unos pocos?
¿Creen estos pocos que sus palabras son "Palabra de Dios te adoramos Señor?
No quiero seguir con preguntas, si decir que a lo largo del tiempo que llevo navegando por aquí, ha habido cosas que no compartía pero que he tenido claro debía respetar la opinión del compañero o compañeros.
Bien Albert, seguramente ahora "alguno" dirá que de pronto me he vuelto catalán,gracias por abrir este apartado el cual creo que puede servir para que sin complejos podamos contar esa otra parte del Sahara,repito, SIN ODIO,pero sin amnesia.
Un abrazo,EL SEVILLA DE P.Y.T
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Josep Carim
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Re: Trato recibido del Ejercito.

Mensaje por Josep Carim »

Domingo!!!!!!!!!!!!!!!

Ponte tranquiloooooooooooo, que no pasa nada; J......er Albert, un sevillano Catala y encima lo hacemos del Barça.

Un abrazo sahariano

Coronel Carim***
Joan Roger Fulladosa
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Re: Trato recibido del Ejercito.

Mensaje por Joan Roger Fulladosa »

Bien amigos, me siento con ganas de opinar sobre el tema (visto que el pisuerga pasa por Valladolid, según me acaban de confirmar en el libro diario y todavía se ve que quedan muros que derribar). Mi vida militar diré que ni fú ni fá y tengo opiniones buenas y nefastas al menos al principio.
Llegué a Hattarrambla (campamento de Policía Territorial) para hacer algo que iva en contra de mis principios ser Policía. Al segundo día de llegar me dí cuenta que lo prncipal para ser buen policía era tenernos toda una una tarde del mes de abril del 73, de dos en dos y con un cubo recoger colillas por todo el recinto, se vé que hacían buen caldo. Al tercer día nos dimos tristemente cuenta donde estábamos, apareció un individuo con gafas oscuras, un bastón de mando y tres estrellas en la gorra acompañado por otro con dos estrellas y una perra llamada petra, abriendo paso otro indivíduo bajito con barba que no paraba de chillar, a los que nos dijeron ivan a ser nuestros instructores. El discurso del tal capitan de mas de dos horas formados al sol, no era ni mas ni menos que Franco era nuestro Dios, para terminar en diez minutos contarnos algo sobre el Sahara y sus gentes. Apartir de este momento, todo se hacía volando y por cojones, pasos mas que ligeros, mardidas de la famosa petra, patadas del teniente por equivocarte, empujones que te tiraban al suelo, el de la barba era mas que la virgen María estaba por todas partes, insultos del teniente y el de la barba, pasos ligeros hasta la saguia los días de tiro, etc. etc. etc., como descanso la máquina de hacer bovedillas, porque claro para hacer el edificio la mano de obra era muy barata, pero menos mal que los domingos fiesta, o es lo que esperábamos si si , los domingos el cubo del principio y a recoger piedrecitas, algún domingo dependiendo del humor del teniente también bajabamos al Aaiun.
El día de la comida de jura de bandera, en plena comida nos pusimos a gritar QUEREMOS A B.... era el nombre deun cabo instructor que el teniente arrestó después de propinarle unas cuantas hostias y patadas por extraviarse una pieza de un mauser prehistórico estando él de cabo cuartel, también en nuestro reemplazo se li disparó en cetme a un cabo durante una guardia de refuerzo e irió a un compañero de MADRID.
Suerte que los instructores eran como nosotros, pero aún mas acojonados si cabe, en cuanto a la comida me adapto a todo, me pareció bién.
Los dos meses en el cuartel del Aaiun y cocheras del govierno como mecánico ya era otro mundo tanto oficiales como suboficiales.
Mi próximo destino SMARA, mejor que el Aaiun, el capitán una gran persona se llamava Rafael de Cardenas, nada parecido al que conocí justo al llegar, con él podías hablar como un compañero más, en total libertad, incluso me atrevería a decir que en el 74 ya era una persona con un sentimiento democrático; compartí con él patrullas a mediados del 74 por mi condición de cabo macánico, por la zona de Hausa, Mahbes, Tifaritis, Amgala, Echedería y el resto de lafrontera con Mauritania.
Seguramente si todos los militares hubiesen sido como los del campamento y lo digo sin rubor alguno yo me largo.
Mis respetos a la gente de valladolid.
Saludos (para mí nos une el SAHARA y los compañeros que nos aguantábamos mutuamente)
JOSE MIGUEL
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Re: Trato recibido del Ejercito.

Mensaje por JOSE MIGUEL »

J..er los de la PT por lo que veo en libro y foros durante la instruccion lo pasasteis jodidillo y digo yo ¿no seria para enrraviaros y asi luego tener mas mal humor? Pues unos de mis recuerdos del BIR cuando saliamos de paseo al Aiun era evitar a los PM,PT,y Lejias lugo ya en Villa devo decir que la cosa cambio supongo que por la experiencia y por el contacto con estos cuerpos
Referente al trato con los mandos que he tenido contacto siempre han sido correctos y en algunos casos amistosos,eso si cada uno con su caracter y formas de ver la vida militar(en el polvorin eramos varios catalanes y en nuestras reuniones nos expresavamos en catalan y habia un oficial que si nos escuchaba su reaccion siempre era "polacos coño hablar español que no me entero") tambien devo decir que este oficial era una persona dicharachera y agradable ,por eso digo cada uno con su caracter
Referenta a la comida solo deciros una cosa en el polvorin siempre sobro comida,casi por decir que subian el doble de lo que nos comiamos y a mi entender de buena calidad pues creo recordar que no falte ni un dia al comedor,la cena era otro asunto,no porque fuera mala sino porque las meriendas nuestras eran favulosas (pescado,mariscos y petate de las familias)
Supongo que como en cualquier comunidad habra compañeros que lo pasaron mal o muy mal y creo que tienen todo el derecho del mundo a expresarlo asi como lo vivieron ,pues ademas de ser sus recuerdos, son unas pinceladas que a los demas nos sirven para terminar de colorear este gran cuadro que es nuestra estancia en el territorio del Sahara y como alguien a dicho para que los demas se den cuenta que aquello no todo fueron claveles y rosas
se puede decir casi que fuimos como los cuerpos actuales que estan en misiones fuera de España y asi se nos devia reconocer
José Marín Díaz
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Re: Trato recibido del Ejercito.

Mensaje por José Marín Díaz »

Estimados saharianos:
Un breve resumen, sobre el trato que recibí durante mí estancia en la PT.

EN EL CAMPAMENTO:
En lo referente al campamento coincido, con lo relatado por el compañero Roger Fulladosa.
Durante mis primeros días allí, un Cabo instructor se encargó, de lanzar algunas palabras al viento, con la voz bien alzada para que casi todos las pudiéramos oír y el menaje era este, BICHOS...., prepararse para el infierno qué os espera!!!.............
Aunque en ese momento yo pensé que, se trataba de una fanfarronada y que no sería para tanto. Pero desgraciadamente estaba equivocado!!!.
No obstante, no puedo generalizar diciendo que todos aquellos instructores fueron unos salvajes, puesto que no haría honor a la verdad. En mi opinión, la mayoría eran buenas personas, incluso, en varias ocasiones los buenos, se permitieron el reprochar -el comportamiento animal de los menos buenos-. Pero claro, la cosa se quedaba en eso, en gestos de desaprobación y nada más y al día siguiente, otra vez vuelta ha empezar y más de lo mismo.

EN EL DESTINO:
Una vez ya en mi destino, la cosa mejoró bastante hasta tal punto, que si mencionara a todos los mandos que me parecieron buenas gentes, la lista sería muy extensa.....Así es que en definitiva, el trato que me dispensaron, lo considero bueno y en alguna ocasión fue excelente. No tengo nada que reprocharles, ni le guardo rencor a nadie, aunque algunos fueron merecedores de ello. Por último darle las gracias a todos por haberme enseñado a sobrevivir en un medio tan hostil cómo era el desierto del Sahara.
Honor y Gloría para todos los que vistieron el uniforme de un cuerpo de elite, como era la Policía Territorial..........

José Marín PT 74/75.
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Manuel Garcia
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Re: Trato recibido del Ejercito.

Mensaje por Manuel Garcia »

Traído del Libro diario.

10224)
Román Martínez del Cerro
martinezgarciapepe@yahoo.es
Localización:
El Puerto de Santa María

Sábado, 5. Noviembre 2011 18:41
Queridos compañeros saharianos. Estamos en el inicio del mes de noviembre. Mes nostálgico por excelencia. Por ellos, en mis recuerdos saharianos, me han venido a mi memoria los que podríamos denominar “los otros”.
En nuestros relatos saharianos se repiten, una y otra vez, los buenos y malos momentos pasados. Pero, en mayor o menor medida, los que recordamos esos momentos, podemos considerarnos dentro del amplio grupo de “los normales”. Con nuestros defectos y nuestras virtudes, pero dentro de la inmensa población “del montón”.
Pero no todos los compañeros saharianos los podemos considerar incluidos en nuestro grupo. Algunos, supongo, en los reconocimientos médicos serían excluidos. Otros por desgracia no.
Tres ejemplos:
El primero un chaval, aparentemente normal. Algo tímido y que el BIR se le vino encima. No fue capaz de superar la presión que supuso ese cambio de vida. Estaba en mi compañía, pero no hablaba con nadie. Educado pero tremendamente solitario. Todos los días, por las tardes y en solitario, cogía unas tropas mortales. Su deterioro físico y mental eran evidentes. Cuando me marché del BIR, no supe nada más de él. En mi conciencia, el no haber podido hacer nada por este compañero. No estaba yo muy sobrado de recursos para meterme en estos temas.
El segundo, un compañero de estudios. Coincidimos en Sevilla, camino del Aaiún. En el BIR, tuvo muchos problemas. Otro amigo y yo pudimos ayudarle. Luego lo destinaron a Intendencia, lo perdimos de vista. En una ocasión me lo encontré por el Aaiún. Habían pasado unos dos meses, desde que salimos del BIR. Estaba totalmente demacrado. Con una depresión “de caballo” y llorando, me contó como lo estaba pasando en su nuevo destino. Los compañeros lo habían tomado con él. No podía más. Y, yo, ¿qué podía hacer? No he vuelto a verle desde aquel día.
El tercero, lo conocí en el Hospital Militar de Las Palmas, en psiquiatría. Venía del Sahara. Varios intentos de suicidio. Uno de ellos en el propio hospital. Se atiborró de pastillas y lo cogimos “dormido” en las escaleras del hospital. Pretendía, al parecer, marcharse. Tres días “dormido” y luego, más de lo mismo. Cuando me enviaron de nuevo para el Sahara, no volví a tener noticias suyas.
Seguro que muchos de nosotros tenemos historias parecidas. En circunstancias duras, muchos superaban con dificultades, esas situaciones. Pero otros, por uno u otro motivo, no. Hoy muy posiblemente nadie se acuerde de ellos. Pero fueron otros compañeros saharianos.
Saludos a todos.
Román

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José Guasch:
Lo primero que debe saber un Mando,es que manda hombres con sus virtudes y limitaciones.Tambien analizar las circunstancias,pues no es lo mismo estar destinado,por ejemplo,un ibicenco en Ibiza,con sus familiares y amigos,que estarlo en el Sahara,como fué vuestro caso,o en Afganistán.Cuando era capitán en el Bir,diariamente,los Tenientes,los auxiliares y el oficinista me daban novedades del estado físico y moral de los reclutas,asi como de los problemas que se hubiesen detectado.No quiero cansaros y solo voy a contaros un caso de los que se dieron.
Fué el más grave,y si no hubiese actuado como lo hice,contando con el apoyo de todos los componentes de la compañía,aun no dormiría tranquilo.
En un llamamiento llegaron dos hermanos que ,como es lógico,
fueron destinados al mismo barracón.
Pregunté a los recién llegados si tenían algún problema.Nadie contestó.
Al dia siguiente,llego a li Cia con los dos Ttes y un auxiliar me dice que uno de los hermanos quiere hablar conmigo.Pasamos a mi despacho y me dice que su hermano tiene un problama en un oido y cree que la arena le puede perjudicar.LLamo al Capitán Médico,lo reconoce y me dice que tiene una inflamación bastante acentuada,que se apunte durante unos dias a reconocimiento,recetándole un antiinflamatorio.
Doy la orden para que, el muchacho,no haga instrucción y quede rebajado de todo servicio.
Lo destino a la oficina de la compañía y le digo que no se preocupe por su posterior destino,que se quedarán los dos hermanos en el BIR y en la compañía.
Cada dia le preguntaba como se encontraba:muy bien mi Capitán.
A los quince o veinte dias falleció.



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José Díaz:
Hola Román, totalmente de acuerdo con tu escrito y si acaso ampliar un poco más, pues mi duda es ¿ que seguimiento hubo despues de la mili?. CERO.

En cuanto a José Guasch, agradecerle , aunque a mí no me tocó, que él fuese la excepción de la regla. Lo normal era todo lo contrario, y el que no se dijera nada, no confirma que no pasara nada.

Ejemplo: ya en la retreta, preguntaban si alguien estaba enfermo y se apuntaba a botiquín, pues tras eso te decian, como no tengas nada, pasado mañana cocina. Yo conocí casos sangrantes, conocidos y callados por los auxiliares,sargentos y tenientes, como el tema puede ser polémico, si continua, le daria datos incluso personales.

Muchos saludos José Díaz


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José Guasch:
No he dudado,en ningun momento,de la veracidad de lo que narra Román.Incluso ya de Tte Coronel,mandando un Batallón,he tenido que corregir a algún mando por swu trato incorrecto con sus,militarmente,inferiores.
Lo que he querido resaltar es que,el Mando debe conocer,en todo momento,del estado físico y moral de sus subordinados.
Si no, podrá llevar estrellas o galones,pero no es competente y carecerá de prestigio dentro de su Unidad.
Jose Guasch


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Román Martínez del Cerro:
Yo pienso que muchos de estos casos no llegaban al conocimiento de los oficiales que estaban al mando de las distintas unidades. Ya que si estas cosas fueran conocidas, no me cabe la menor duda que hubieran tomados las medidas necesarias.
De los tres ejemplos, está claro que el del hospital de Las Palmas si era conocido. Por eso ese chaval se encontraba en el hospital. Otra cosa es la dificultad que existe, por desgracia he conocido algún caso, en controlar a una persona que con una enfermedad mental pretenda el suicidio. Una veces quiere realmente buscar ese fin y en otros casos es una forma de llamar la atención para avisar del problema que está sufriendo, pero en ambos casos el peligro es enorme y todos los cuidados son pocos.
En el caso del amigo que fue destinado a Intendencia, según me contó, se lo comunicó al oficial de su compañía. Pero por una falta de tacto, se enteraron los compañeros. Con ello, en lugar de solucionar el problema, este empeoró. Fue tachado de chivato y para qué más. Aumento considerablemente el maltrato hacia él. En esta circunstancia, el miedo le impedía volver a pedir ayuda al mando.
En el caso del recluta del BIR, lo más probable es que los oficiales no conocían la situación por la que pasaba. Hay que tener en cuenta que estas cosas solían ocurrir por las tardes o noches. A esas horas, solo se encuentran pendiente los oficiales y suboficiales de guardia y el capitán de cuartel. En unidades tan numerosas es muy posible que estas cosas solo eran conocidas por los compañeros que convivían muy próximos a los afectados. El miedo a ser tachados de chivatos unido a la juventud y a un mal entendido sentido de la disciplina, hacían el resto.
Yo tengo la experiencia que siempre que acudí, fui perfectamente atendido. No solo eso, en la mayoría de los casos el interés del superior por resolver el problema superó lo estrictamente reglamentado. Tengo pruebas de ello y quizás en alguna ocasión os cuente algo más. Pero pienso que por mi edad, fui con prórrogas y mi forma de ser, pudiera tener menos dificultad en comunicarme con mis jefes. Tenía compañeros más jóvenes y con un carácter distinto, se les hacía un mundo, por ejemplo, ir al despacho de un teniente o capitán.
Saludos a todos,
Román


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Emilio Rey Coronado:
¡ Hola compañeros TODO@S !, Acabo de leer estos comentarios de esos veteranos que lo pasarón mal, o muy mal, y me viene a la memoria un echo, que a pesar de que ocurrio hace 51 años, son muchos los días en que los rememoro , y no lo paso muy bien, pensando y pensando en que terminaria. Me liberaría bastante saber el final y si este compañero,me parece que se llamaba Delfin, llegara sano y salvo a su casa con su familia.

Los echos ocurrierón en un convoy, llevando suminitros a Smara o Villa Cisneros, no recuerdo bien. Delfin era conductor y en una parada para repostar, él coloco su camión junto a la cisterna y cuando le llenarón el deposito arranco para volver a su sitio, pero con tan mala fortuna-según comentaban al llegar a la Compañía-que un legionario se habia tumbado a la sombra del camión y fue arrollado, falleciendo despues.
Esto ocurrio, unos meses antes de licenciarnos, y cuando llegó el día de coger los camiones para ir a la Playa y embarcar para la Peninsula, este Veterano, no pudo hacerlo, porque estaba esperando el Juicio militar, así que no aparecío por ningún lado y aquí vienen mis desalientos, ¿Que pensamientos le pasarían por su cabeza, al saber que su quinta volvia a la Peninsula y él se quedaba allí?, ¿Cuanto tiempo más, tuvo que pasar allí, en las condiciones en que se encontraba?, ¿ Que habra sido de su vida?, enfin, me pongo en su lugar y no me puedo olvidar de ello. Si alguno, que fue en la siguiente quinta, lee esto, y estuvo en Automoviles, le agradecería infinito, me sacase de este pozo, no profundo, sino, somero, pero sin poder salir de él, despues de 52 años.
Espero no haberos cansado mucho con mis recuerdos, pero han sido estos comentarios de los Compañeros, los que me han decido a hacerlo.
Un cordial abrazo a TOD@S.

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fjdelacuesta:
Interesante tema el suscitado por el compañero Roman ¿pero acaso no sería mejor trasladarlo a un foro concreto?, estas cosas que nos aportan conocimientos sobre nuestra estancia en el Sahara, son las que tienen que perdurar y para ello lo ideal es un foro, pues ya sabemos que las anotaciones en el Libro Diario desaparacen de la vista inmediata con otros temas de menos interes.
Un saludo.


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Pepe Rguez"El Relaciones":
Llevas toda la razon del mundo Fernando, es increible con la cantidad de temas abiertos en los Foros (yo pienso que mas de los que deberian estar abiertos), Veteranos de la pagina que ya conocemos el uso de ella, nos empeñamos en escribir, verdaderos relatos en el Libro Diario, en el Foro Sahara-Mili--->Trato recibido del Ejercito, por ejemplo esta abierto y ahi se podia trasladar perfectamente estos escritos y debatirlos.

Saludos.


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Francisco De Miguel:
Hola,uno de los casos que yo conoci me viene de vez en cuando a la memoria, sería uno mas de los hubo sin pasar por ningún reconocimiento médico,el caso era de una tartamudez y los ojos apenas los podia abrir,la estatura muy justa.Todo el empeño del Teniente fue de hacer de logopeda hasta conseguir que supiera presentarse sin tartamudear y de seguido, llegó el día señalado cuando terminamos el campamento y fuimos al Cuartel, el Teniente le acompaño al despacho del Comandante para la prueba final(el comandante ya sabia de que iba)..A la orden de ud mi Comandante se presenta el Agente tal y tal todo de seguido eso si con los ojos cerrados...
Ahora me hace recordar la pelicula de Miguel Delibes , Los Santos Inocentes..este chaval era huerfano y venia de un cortijo del Sur..

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José Díaz:
Como anticipé que el tema podia ser polémico o bien constructivo según se mire, ya para interes general os pongo estos dos ejemplos, ya escritos hace tiempo un por mi, José Díaz y otro por J.L.Brugal Zopeque.Este, me costa que es tan cierto como el escrito por mi.

- Foro Sahára-Mili,Recuerdos del Sahára, Página 2 de fecha 25-2-2010.
- Foro Relatos, Los Paraliticos de fecha 2-10-10.

- El asunto personal si es necesario, ya lo contaré en otro momento. Espero ampliar con esto el asunto abierto por Roman
Muchos saludos José Díaz


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Guasch Cañas:
Con la información que da Pepe Rodriguez el relaciones,me he ido a Sahara Mili-Trato recibido del Ejército.Os recomiendo lo escrito por Jordi Roig (12 de Mayo 2008) y por,ROMAN MARTINEZ (10 Mayo de 2008)...........


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Roger:
Como en todos los colectivos (el militar no es la exepción) hay de todo, en Hatarrambla los oficiales y sub oficiales que conocí en abril del 73 iban en consonancia con la dictadura y el pobre que era algo diferente (según ellos claro) todos los palos y mofas los tenía adjudicados y lo peor era que la mayoría de instructores les seguían el " rollo" (no olvidemos que estos instructores tambien eran de reemplazo) un compañero de campamento con problemas de depresión presencié como un sargento lo insultava y le soltó una soberana ostia por suplicarle que no podía mas y que POR FAVOR quería un médico, me volví encontrar con él en un destacamento meses mas tarde y su nuevo oficial lo trataba con más respeto que al resto de agentes y la verdad estaba anímicamente mejor.


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Román Martínez del Cerro:
Quiero agradecer al coronel Guasch su aportación al tema. Seguro que tiene muchas vivencias para contarnos. Por otra parte, Juan Cabrera sitúa nuestros recuerdos en su lugar histórico. No era la medicina igual en el año 75 que en la actualidad. Eso es evidente. También tiene toda la razón en su consideración sobre los grandes cuarteles, más el de instrucción y, a veces, las reducidas dimensiones de algunos destinos. Por ejemplo, en el Cuartel de Mata, convivimos legionarios del III y IV Tercio. Nómadas. Infantería de Fuerteventura, Red Permanente y nosotros, los llamados Pistolos. Nuestro comandante, legionario, Díaz Serén, un auténtico abuelo, pendiente de todos. Nuestro teniente, Montañés Barraco, de Ingenieros, un auténtico padre. Y la relación entre los compañeros era excelente. Ya he dicho en más de una ocasión que si no llega a ser por el sueldo, allí me hubiera quedado para siempre. La vida en esos destinos era en ocasiones casi familiar.
Una aclaración, mi primer comentario no pretendía pasar a la posteridad de la página. Ni crear un debate. Mucho menos molestar a nadie. Solo era unos recuerdos que me vinieron a la mente un desapacible día de noviembre. Y ya sabemos que un recuerdo trae consigo otro detrás. Por ello no llego a comprender el motivo de no poder escribir en el Diario. Eran unos recuerdos de ese día, sin más. No me importa que se pierdan al rato, al día siguiente o a los dos días. Pero siempre que se dice algo en el Diario algún compañero nos manda a un Foro. ¿No pensáis que el Diario también hay sitio para algún tipo de comentario? ¿Puede alguien explicarme el motivo de mandarnos siempre a un Foro? Seguro que habrá algún motivo, pero yo no llego a saber cual es.
Saludos a todos y ¡menudo catarro he pillado en este día de noviembre!
Román Martínez del Cerro






10227)
Felix Lopez Ceca
felixceca@gmail.com
Localización:
El Escorial Madrid

Domingo, 6. Noviembre 2011 18:27 Escribir un comentario Enviar E-mail
La verdad es que la estancia al menos en el BIR no fuera más trágica, las condiciones de salubridad eran no lamentables eran patéticas. Pero solo teníamos 20 años y una inexperiencia total, yo estuve de cabo cocina 3 semanas y recuerdo perfectamente como era aquello de lamentable, la higiene sencillamente no era tolerable, no había agua y fregar las perolas con arena en la parte norte del campamento para que contar.
No recuerdo el remplazo, tuvimos un ataque meningitis, un compañero de reemplazo que se quedó en la plana mayor lo sufrió y lo paso fatal, creo que se recuperó, era de Madrid y no recuerdo su nombre aunque me guastaría volver a verlo. Recuerdas las fumigaciones por ladillas, las duchas en las que te daban tres minutos para ducharte, los baños en la playa los días de siroco, las moscas y el mosquil; en fin una higiene más que lamentable.
Otro aspecto aun mas importante era el sicológico, conocí muchos casos, recuerdo dos, uno en particular, uno era el de un recluta que se llamaba Soldado Mato, las acuarelas que había en los barracones eran todas suyas. Esta persona iba fuera de quinta, era bastante mayor que los demás, y de condición física débil, fuimos incapaces de que marcara el paso, juro bandera como enfermo. Una vez terminado el campamento le destinaron al cuartel general, en aquel caso el ejercito se porto de una forma admirable, no que ha sido de él.
El otro caso lo había contado anteriormente, el chaval era de Madrid, alto, fuerte pero algo retasado, un sábado por la tarde cogió una borrachera de campeonato, al volver a la compañía tuvo un altercado con el oficial de guardia el teniente Juan Silvela Milans del Bosch, el recluta le cogió de la solapa y lo elevo en el aire, no sé si dieron parte o no, finalmente lo mandaron a Canarias y lo licenciaron, el comportamiento de teniente fue definitivo.
Ya te conté en algún caso que mi experiencia en el BIR fue muy buena en el sentido de aprender a conocer a las personas, la mayoría de ellos eran grandes chicos, otros no tanto; pero los que realmente me impresionaron eran aquellos que derrumbaron nada más que llegar al campamento, los había de varia clases, los que hablaban español con dificultad, los que era la primera vez que salían de casa, los débiles de carácter. Un recuerdo imborrable era la primera carta que recibían después de dos semanas en el BIR, cuando las abrían, se recostaban en la pared y lloraban, a continuación reían, una estúpida broma era amenazarlos con no repartir el correo (nunca lo hicimos). El grupo que mas me marco fueron cuando nos tocaron los analfabetos y por lo tanto los maestros, había que leerles y escribirles las cartas "que experiencia"
Félix Lopez


Juan Cobo:
El amigo Felix Ceca fue cabo instructor en el BIR en la 1ª cia y estuvo expuesto al siroco 16 meses, desde Enero del 68 hasta Abril del 69


juanluis cruz:
Yo del BIR y en primer lugar la 1ª Cª solo recuerdo cosas buenas,Empezando por mi capitan (que no me acuerdo en este momento de su nombre , haber si alguien me lo dice remplazo 69-70)de mi Teniente Dn.Fernando Sopranis y Andujar,que por cierto tuve el honor de saludarlo en Galicia,de mi Cbo 1º,de mi Cabo y paisano Cobo, en fin de todos los que estuvimos en aquella epoca en la 1ªCª, lo que pasa es que ahora se ve como un martirio pero en su momento y tomandolo con lo que ibamos fue un veraneo.
Saludos
Juan L.Cruz
Manuel García.
Administrador
jose guasch cañas
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Re: Trato recibido del Ejercito.

Mensaje por jose guasch cañas »

El Capitán de la 1ª compañía se llamaba D Manuel Garcia Vieyra (qepd) J.Guasch
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Miguel Henarejos
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Re: Trato recibido del Ejercito.

Mensaje por Miguel Henarejos »

Pues yo en el Bir,no recuerdo ningun mal trato,pero en el cuartel de Artilleria en el Farnesio teniamos un Sargento de instruccion muy duro,nos hacia pasar por debajo de las camas de la Bateria,de punta a punta de la nave y vuelta,por lo cual debido al poco espacio las espaldas de mas de uno,dependiendo de lo gordo que estaba,aparecian arañadas o ensangrentadas con los muelles y alambres del somier.
Yo debido a dos veces que tuve rota la clavicula izquierda,años atras, pues hacia mas bulto y sobresale mucho ,de tal forma que al hacer instruccion sobre el hombro,el punto de mira del Cetme coincide exactamente con el hueso ,e incluso me arañaba,yo subia o bajaba el Cetme para que no coincidiera,pero venia dicho Sargento y me apretaba el Cetme contra el hueso, (pues nunca alineaba con el resto de la formacion y se veia de lejos) y me producia sangre.
Incluso debido a mi defecto del oido,en una ocasion vino y me dijo:"Yo a este le curo la sordera" y me introdujo una colilla encendida en dicho oido.
Como es obvio no voy a decir sus nombre,solo digo que no le guardo el minimo rencor,es mas,mantengo correspondencia y telefono con él y he intentado que viniese al Encuentro de La Coruña,sin conseguirlo.

El resto de Mandos siempre se portaron muy correctos.

Cosa muy distinta es el otro Sargento que teniamos en el taller,que en cuanto empezaba la instruccion,mandaba "alto" "mecanicos y conductores,rompan filas" y para el taller. El Sargento de instruccion se "cabreaba" con el del taller y siempre estaban liados por este motivo,muchas veces en el taller no teniamos nada que hacer,solo lo hacia para librarnos de la instruccion.

Esta es mi pequeña experiencia con respecto a los Mandos.

Un abrazo a todos
"El Artillero Mayor" Villacisneros 66-68
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Juan Luis Jimenez
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Ubicación: Ceuta

Re: Trato recibido del Ejercito.

Mensaje por Juan Luis Jimenez »

Henarejos eres más bueno que el pan y de pequeña experiencia nada es una enorme experiencia y mala de verdad.
Que malo tu sargento y algunos más.
Un abrazo Miguel.
Juan Luis Jiménez.
emilio cisneros
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Re: Trato recibido del Ejercito.

Mensaje por emilio cisneros »

En uno de los Envuentros "Madroño" celebrado hace pocos años en la Casa de Soria, se invitó, por parte de los Organizadores, al General Don Félix Sanz Roldán, no por dicha condición, sino por haber sido destinado como Teniente en los años 66 o 67 al BIR nº 1, y por tanto cumplir debidamente con la condición o categoría de sahariano.

El General Sanz tuvo la amabilidad de ofrecernos unas palabras de agradecimiento y recuerdo a los que con él compartíamos mesa y mantel, y, mira por donde, una de las cosas que dijo, lo cual le honra como conocedor de lo que era el Sahara en aquellos años, es que si las condiciones en los que estábamos los reclutas y soldados que hicimos la mili allí hubieran podido ser informadas con la libertad de prensa que existe ahora en España, hubiera sido uno de los mayores escándalos para el resto de los ciudadanos, y que muy posiblemente, rodarían cabezas.

Fueron sus palabras, con las que no puedo estar mas de acuerdo.

Ya conté en otro "hilo" que hace años, visité el campo de concentración de Dachau, en las afueras de Munich. Campo de concentración, que no de exterminio, pero erigido en mitad del campo y en los años treinta y tantos.

Pero no se si por ser alemanes, o por que, pude comprobar que los barracones de los presos, parecidos a los del BIR, pero tres o cuatro veces mas grandes, disponían en su interior de agua corriente, lavabos y letrinas. Y eran presos, o sea, la categoría mas baja de los allí destinados.

No hace falta que os diga, porque ya lo sabeís, como eran los "servicios" del BIR. Y no éramos presos, sino miembros de las Fuerzas Armadas del Ejército Español. Y sí, el mismo año que el hombre llegaba a la Luna, los reclutas españoles limpiaban las perolas de la comida con arena.
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Josep Carim
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Re: Trato recibido del Ejercito.

Mensaje por Josep Carim »

SAHARIANOS:

El trato: que yo recibi durante todo el tiempo 16 meses fué dentro de la situación, y condiciones normal, y no solo commigo, sino con la gente que tenía cerca tanto en el BIR como en el cuartel , en la PT la instrucción era muy dura pero con 20 años lo superas.

En nuestro tiempo de cole, yo recibi muchas hostias y castigos por sinples tonterias, una vez me pusierón de rodillas brazos en cruz y unos libros en cada mano, por el simple hecho de llevar en la chaqueta un pin o insignia de la bandera britanica.

Con esto no quiro exculpar a nadie, solo decir que de malas gentes las hay en todos los sitios, y las condiciones son las que tocaba vivir; cada uno lo cuenta según como le ha ido.

Para mi en cuanto al trato con los mandos muy bien, con algún instructor alguna tirantez pero que no vale la pena ni nombrarla, y ojo que tambien estaba el tipico soldado que cada dia se metia en algún follón.

Saludos.

Carim


PD: Para los de la PT la única bofetada que vi pegar, fué al Famoso capitan Ballarín.
Joan Roger Fulladosa
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Re: Trato recibido del Ejercito.

Mensaje por Joan Roger Fulladosa »

Josep Carim, en mi reemplazo a parte del que tú nombras, también ví a Soriano y a Hervada y para mas inri, cuando su perra me arañó, no veas como se reía el condenado. Menos mal que el campamento duró poco, pero se izo eterno. El resto de mili para mí fué de lo mas correcto el trato recibido y más en Smara con el capitán Cardenas.
Saludos
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Josep Carim
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Re: Trato recibido del Ejercito.

Mensaje por Josep Carim »

De Soriano no le pongo cara, si Hervada otro hueso el y la perra.

En el Bir teniamos un sargento, GUNTúRIZ ojo con el, este me puso de cara a la paret del barracón tocandola con la nariz y a pleno sol hasta que se canso, total porque al saludarle no di la tipica palmada.

Saludos

CARIM***
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Eugenio del Campo Yuste
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Re: Trato recibido del Ejercito.

Mensaje por Eugenio del Campo Yuste »

Yo digo lo mismo que el coronel Carim, que creo que en compensación con aquel tiempo en el cual estábamos, el trato era correcto, hasta cierto punto, aunque siempre está aquel desalmado que quiere abusar de su fortaleza humana o el puesto que ocupan, lo que se llama hombría para ellos, por que se creen mejores o superiores a los demás, aunque la verdad es que siempre hay aquel o aquellos que se han pasado en cierto modo, como sucedió con un cabo instructor, con uno de nuestros compañeros de campamento, que enseñando o haciendo o aprendiendo sobre el cetme, le dio con la culata en el vientre y lo tiro al suelo y este señor que asi, no se le debe llamar, lo hizo con ésta persona en varias ocasiones, tanto esto como otras cosas y nosotros ver oír y callar, porque si no también nos podría tocar a cualquier otro de nosotros, y esto creo que lo recordaran los que hicieron el campamento en villa Cisneros, del 4º llamamiento del 1972,
También en la compañía un señor que se consideraba cabo furriel, les cruzo la cara a varias personas, legionarios por no querer limpiar la compañía antes de recibir el correo, que era cuando aprovechaban para vengarse de la tropa, al toque de correo, con mangueras cepillos bayetas y detergente, que era lo que más deseábamos en aquellos tiempos y más aún aquellos que como el que suscribe dejo un hijo y mujer en península, aparte de toda la demás familia, como los demás, y siempre hay anécdotas que se salen de la vida normal o diaria de aquellos tiempos, que pienso que no tiene derecho al pan que se comían y el agua que bebían, aparte de todo lo demás, es posible que puedan ser de los que hay desesperados en éste mundo, y así pasa que hacen la vida imposible a los que están a su alrededor y no disfrutaban el día a día como tendría que ser, siempre ha habido y habrá desesperados que ni viven ni dejan vivir a los demás.
Un saludo de un Corito Extremeño Legionario del 1972.
IV Tercio Alejandro Farnesio
Villa Cisneros, Sahara Español
El Corito-Extremeño; de 1972 al 1974
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