Sed y Calor

FORO de la WEB "La Mili en el Sahara"
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emilio cisneros
Mensajes: 157
Registrado: 21 Dic 2004 11:15

Sed y Calor

Mensaje por emilio cisneros »

Aparte de la mili en si, una de las cosas que mas nos preocupaban de nuestras futuras "vacaciones pagadas" en el Sahara era lo que habíamos oído a los compañeros de reemplazos anteriores respecto a las duras condiciones del territorio, sobre todo a los excesos del clima. Un teniente, cuando todavía estábamos en Madrid, nos intentaba quitar la aprensión comentando que mas duro era pasear por Madrid en Agosto a las cinco de la tarde que hacerlo por El Aaiun, pero sus argumentos no nos convencían en absoluto. Luego, una vez allí, cada uno pudo encontrar sus propias vivencias. El período mas duro en el BIR se correspondía con el 2º llamamiento, al coincidir con los meses de verano, pero tal vez su cercanía a la playa moderaba un poco los calores del interior. Desde luego el interior era otra cosa, e imagino que las bases de Mahbes, Edcheria, Tifariti y otras, deberían ser las mas duras de soportar, por esas y otras razones. Mi estancia en El Aaiun me llevó a soportar temperaturas máximas de 48ª al sol durante quince días seguidos, en el mes de Julio, pero afortunadamente mi destino de oficinista evitaba exponerme al sol y a sus consecuencias. A la noche bajaba la temperatura, mas que ahora en las grandes ciudades, que las recalentamos con coches, asfalto y aparatos extractores de aire acondicionado ,y dormíamos apaciblemente, aunque en "pelotilla picada" y apenas tapados por una sábana. Bueno, podemos hacer una encuesta o concurso por ver quien pasó mas calor en el Sahara y como se enfrentó a la deshidratación, si tuvo todo el líquido que necesitaba o había restricciones. En fin, este es el tema que propongo.
julio diaz
Mensajes: 16
Registrado: 25 Jul 2005 16:41

Re: Sed y Calor

Mensaje por julio diaz »

[Amigo Emilio:
Con respecto al tema que planteas acerca del calor y la sed, decirte que calor, efectivamente si hacía, pero considerando que vivo en Extremadura, los agobios del calor sahariano no me hacian mucha mella y, sinceramente, no pasé excesivo calor.
En cuanto al agua, una vez superado el periodo de instruccion en el BIR, que lo hice entre Junio y Agosto, y que allí si se hechaba en falta el liquido elemento, porque en el año 64 no disponiamos de duchas ni nada parecido y el suministro para aseo y para beber, estaba en unos bidones metálicos, en el Aaiun teníamos agua de sobra, podíamos ducharnos todos los dias puesto que, desde Intendencia se suministraba con las cubas a todos los cuarteles y, por tanto, a nosotros no nos faltaba nunca y, permanentemente se llenaban los depósitos del cuartel.
Por todo ello, mi experiencia en estos dos aspectos, calor y agua, no fue en absoluto traumática a pesar de estar en un territorio que, por su propia denominación hubiera conllevado el soportar ámbos fenómenos.
Alberto Guiñon Garella

Sed y Calor.

Mensaje por Alberto Guiñon Garella »

Apreciados saharianos Emilio y Julio:
Referente a este tema, os dire que hice la mili en el Grupo Disciplinario del Sahara ó Batallón Disciplinario ó tambien Cabrerizas ( con sus corrigendos correspondientes) en el reemplazo 1962/1963, y aparte de hacer el campamento en sidi Buya de Marzo a Junio del 62, oficina en el Aaiun hasta Noviembre 62 y a partir de este momento hasta la licencia en Julio del 63 en Hausa, el calor a sido variable, donde mas lo he pasado ha sido en Hausa, visperas del licenciamiento, que un compañero hizo freir un huevo , en una pizarra que abundaba por estos lugares, la verdad no tuvimos necesidad de aceite, ya que se frió enseguida, el termómetro
que habia en al tienda marcaba 49 º de calor, aunque subia mucha temperatura, el ambiente era seco, se podía soportar, alguna vez algún oficial nos indicaba de que nos protegieramos, para no coger alguna insolación, en cuando a la sed, no hemos tenido penurias para beber, pero sí para la limpieza, el agua lo traian de los pozos que habian cerca del castillo de Hausa, y aunque era un poco salobre se podia tomar.
De todos modos habia que tener cuidado con las humedades dentro de las tiendas de campaña, ya que de vez en cuando lo mojabas para que estuviese fresquito, pero entrañaba el cuidado de que no entrara o vieras alguna lefa ó vivoras.
Os tengo que decir que a partir de la base de la tienda ó vientos, habian una profundidad de 1,60 m. osea que para entrar, tenias que bajar unas pequeñas escaleras de adobe, para que el ambiente estuviese fresco,
aunque lo invadian las moscas, con las cuales haciamos campeonatos de ver quien mataba mas, con un poco de agua, se mezclaba con unos polvos que suministraba sanidad.
Espero haber colaborado un poco mas, con las historicas vivencias en el Sahara.
Un fuerte abrazo.
Alberto Guiñon Garella
aggarella@ya.com
José Marín

Sed y Calor.

Mensaje por José Marín »

Estimados compañeros Saharianos:
Referente al tema del “Calor y la Sed”, quiero comentaros una circunstancia que me hizo pasar un calor sofocante. En el mes de Junio del 75, se licenciaban muchos conductores de la PT, y ha consecuencia de ello, se colgó una nota para apuntarse los que quisieran sacarse el carne de conducir, para posteriormente suplir a los compañeros licenciados. Nos apuntamos aproximadamente unos 20 compañeros, entre los que estaba yo. En la designación de los horarios de prácticas, mi clase era de 17:00 a 18:00 horas, por lo que todos los días del mes de Junio, a las 16:30 salía de mi cuartel y cruzaba El Aaiún andando hacia “cocheras”, recuerdo que en las casas con tejadillo-volante, me pegaba a las paredes como las lagartijas para aprovechar el mínimo resquicio de sombra, algunos días cuando yo salía para las practicas, mire el mercurio y marcaba 45º grados a la sombra, por lo que en el sol harían unos cuantos más. Algunos compañeros dormían la siesta a esas horas y el sudor y las moscas acampaban a sus anchas.
En cuanto al agua, creo recordar que teníamos 3 días por semana que podíamos ducharnos, siempre y cuando estuviéramos pendientes del horario en que se abría la llave de paso. No obstante había una pila permanente de agua, donde lavábamos nuestros uniformes y muchos compañeros nos aseábamos en esa pila. También había a la entrada de cada compañía, una garrafa de agua en su dispositivo refrigerante, con un “jarrillo de lata” del que bebíamos todos. A si es, que lo que se dice carencias importantes no hubo en mí época, eso es lo yo creo.
Un saludo,
José PT.74/75:
Fco. Fdez. Díaz-Guerra
Mensajes: 16
Registrado: 21 Mar 2006 22:10
Ubicación: Mérida

Sed y calor

Mensaje por Fco. Fdez. Díaz-Guerra »

Sed, lo que se dice sed, creo que no pasamos.
Si os fijais, en los últimos tiempos, se ve a la gente por la calle con las botellitas de agua, muy concienzadas de lo que es una buena hidratación, entre tanto se sale y entra de locales climatizados. Eso, que es confort, supone un debilitamiento de la capacidad de resistencia. Ante una situación de carencia, el sufrimiento psicológico es aún mayor.
El agua que se tomaba era salobre, con buenas dosis de lejia. Te acostumbrabas, hasta el punto que, pasados unos días, tomé agua embotellada en el Parador y estuve a punto de escupirla por "sosa" (pasada la primera impresión me supo a gloria).
Y Calor, bueno, pues un poquito. Aunque en el BIR (Julio-Septiembre 75) estaba suavizado por el mar; ese tiempo, dentro de una tienda de campaña, trece hombres (al segundo día: tigres) y doscientas moscas sin piedad hacian las siestas insufribles.
El primer domingo que salimos a El Aaiún, todo el día dando vueltas, casi sin tener donde meterte; el uniforme dos tallas más y la gorra una menos; con el sudor de la frente mojando el cuero nuevo de la gorra, empapándose y apretando aún más la desprotegida cabezota. Aquel si fué un autentico dolor de cabeza, de toda la cabeza.
La novatada de ese día, otra más, me la dí yo solito. No sé si recordais que una de las cosas que se recomendaban era no llevar el bolígrafo en el bolsillo; bien, pues con mi BIC, que costaba un duro, sudé toda la tinta azul en la camisa de bonito.
Al menos conseguí que nádie me la cambiara.
Ir por la sombra, amigos.
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