Me parece magnífico que hayas abierto este tema. Como siempre tu ingenio se adelanta a todos.Manuel Cordero Canela escribió:Se o me supongo que para algunas fueron molestas, por emplear una palabra suave, para otros que se salvaron graciosas, simpatica, etec.,
¿pero por que no habrir un foro sobre las novatadas? queramos o nos era otra "diciplina del ejercito" lo digo por que en la que a mi me toco da la novatada a los que en verdad nos venian a reenmplazar
Las novatadas que se gastaban entonces, por lo que yo se y por mi experiencia própia, no pasaban de ser bromas mas o menos duras, pero bromas al fin y al cabo.
En la 3ª Cia de la Policia Territorial, nos esperaban los veteranos, con mas ganas que verguenza. Durante todo el dia se habian ocupado en vaciar y limpiar la pileta, llenandola de agua limpia. Hicieron acopio de garrafas de mal vino tinto y cuando llegamos, despues de que el Capitán, el Teniente y el único Sargento europeo, se retiraron, comenzó la juerga.
Esta consistia en beberse una jarra de las de agua, llena del maldito vino. Bebersela sin despegar los labios, sino habia algún cachete, mas vino en la jarra y vuelta a comenzar. Cuando te habias bebido TODO el contenido del recipiente, te agarraban por los pies y por las manos y te tiraban a la pileta y esto se repetia bastantes veces. En medio de todo, se acercaba uno con la chaqueta del Teniente y otro con la del Sargento y comenzaba la bronca por estar mojados y borrachos. Que era una verguenza y que ibámos a fregar el patio por haber tirado en el tanta agua. Los veteranos venga a aguantar, mas serios que un palo y nosotros, unos en calzoncillos y otros con toda la ropa, pero todos como una sopa, acojonados por la faena que nos preparaban. Fregar al patio con trapos para recoger el agua. ¡Que putada tio!.
Pero hubo uno, mas entrompado que los otros, que era de Barcelona, como yo y se llamaba José Mª Girona Martí. Este pájaro le contestó al "Teniente", - Yo no frego por que no me da la gana. Si quieres ya lo fregarás tu con los h...".- El "Teniente" se cabreó y le dijo que se pusiera firmes y el amigo José cerró los dedos, se los puso en los labios y los hizo sonar como una trompetilla. Se bajó los calzoncillos, se dió media vuelta, se agachó enseñandole el culo y se soltó un pedo como una casa. Se metió en la compañia, tumbandose en su litera y se puso a dormir como un bendito. Y aquí se acabó la novatada por el momento, pero durante la noche y el dia siguiente, aquel vino nos machacó las entrañas y nos hizo dar un montón de carreras a causa de la diarrea y la vomitera. Y la cabeza. Era cabezón el muy maldito vino. Mira si me hizo efecto que no he vuelto jamás a coger una pea. Y me gusta el vino, como al que mas, pero lo mido mucho antes de pasarme con el.
Cuando llegaron los reclutas, tuve la suerte de estar allí para recibirles y lo hicimos con todos los honores, los dos reemplazos. Sin mas refinamientos que los recibidos por nosotros. Pero ellos, si fregaron el patio. Que putada tio. Allí a cuatro patas, mas de uno con la vomitera que tuvo que limpiar, fregando el suelo con trapos. Hipólito conoce el patio, es el mismo que sale en la foto donde se corre la juerga con los dos amigos. Y tu también debes de conocerlo, puesto que estaba su muro pegado al muro de tu cuartel.
¡ Joder! ¡Que tiempos!.
Un abrazo a todos, saharianos.